El estrés laboral afecta a una gran parte de empresas. Los movimientos y cambios socio-económicos provocan que una gran parte de las empresas no tomen el rumbo adecuado, no sepan cómo salir a flote y vivan el presente con una presión excesiva.
La presión en las organizaciones se diluye en la cadena de mando y acaba sobre los directivos, mandos intermedios y al final sobre gran parte de la plantilla. Para tener una empresa saludable debemos ser conscientes de lo que el estrés afecta a nuestro rendimiento y de cómo podemos evitar un puesto de trabajo con demasiados estresores.
En primer lugar es necesario decir que cada persona vive el nivel de estrés de una manera particular. Dos individuos bajo los mismos estresores vivirán un estrés diferentes. Cada persona es permeable al estrés de forma distinta.
Una de las principales consecuencias del estrés es la pérdida de inteligencia, es decir tomamos peores decisiones bajo situaciones prolongadas de estrés. Eso es lo que hace que muchas personas tengan un bajo rendimiento laboral y por lo tanto acaben diagnosticados con el síndrome de agotamiento profesional o burnout.
Otra de las consecuencias de un alto nivel de estrés es la pérdida de salud. Ante una amenaza nuestro cuerpo se defiende de dos formas distintas mediante el sistema inmunológico si la amenaza es interna (virus, bacterias, etc…) o mediante la activación del eje HPA si la amenaza es externa, cuando ocurre algo a la luz de nuestros ojos y activamos todos los mecanismos de defensa de nuestro cuerpo, cuando nuestro corazón bombea más rápido y nos preparamos para la respuesta pelea o huye.
Está demostrado que el estrés activa el eje HPA Hipotalámico – Hipofisario – Adrenal, esto quiere decir que muchos profesionales vivimos constantemente bajo “aparentes” amenazas que activan nuestras defensas más primitivas, que nos preparan para luchar o para huir.
El problema es que la activación del eje HPA inhibe al sistema inmunológico. Es decir, si corremos delante de un tigre que quiere devorarnos, nuestro cuerpo no se preocupará de luchar contra un resfriado o cualquier otra amenaza interna.
Esto hace que en las empresas en las que hay gran cantidad de estrés en el trabajo el absentismo sea mayor que en aquellas organizaciones saludables en las cuales se goza de un buen clima de trabajo y de una activación del estrés justa y suficiente para obtener buenos resultados.
Es posible disminuir el estrés en el trabajo haciendo una o varias de estas acciones.
1.- Rediseño del puesto de trabajo. Cuando nuestro lugar de trabajo es estresante, por ruidos, conversaciones o cuando nuestro puesto de trabajo necesita de ayuda, porque con una persona no es suficiente. En ocasiones cambiar algún detalle del puesto de trabajo aumenta la concentración de la persona y disminuye su estrés.
2.- Aprender habilidades para lidiar con la gestión del tiempo y del estrés. Si aprendemos a organizarnos, planificar, y llevar a cabo nuestras tareas con mayor efectividad no sentiremos la presión del estrés de forma tan punzante. Aprender habilidades como saber decir “no”, como planificar la jornada en base a prioridades y objetivos, y otras tantas nos ayudarán a sentir que dominamos la situación.
3.- Eliminar el estrés residual. Queramos o no, el estrés se acumula en nosotros. Es una de las características de estas sociedades que llamamos desarrolladas, todos tenemos mucho que hacer, en ocasiones “demasiado que hacer”. Por lo tanto tener mecanismos para eliminar el estrés es de gran ayuda. Practicar meditación, recibir un masaje, hacer deporte, descansar lo suficiente son formas de disminuir el estrés provocado por el trabajo.
Las empresas y equipos tóxicos se caracterizan por muchos motivos, pero uno de ellos es el excesivo nivel de estrés, el cual provoca pérdidas de rendimiento considerables.
Ser conscientes del nivel de estrés de nuestra organización y tomar medidas para mejorarlo es una necesidad hoy en día. Todas las señales que veo a mi alrededor me demuestran que en unos años veremos legislaciones a este respecto. Las empresas con demasiado estrés cuestan demasiado dinero a las arcas públicas. Las enfermedades derivadas del estrés (principalmente relacionadas con el sistema nervioso y cardiovascular) son demasiado caras para las economías que quieren marcar una diferencia.
Los valores de una sociedad también evolucionan, y a mí particularmente no me gustaría que mis hijos trabajaran en una organización que está destruyendo su salud y consecuentemente su vida. Por este motivo creo que en pocos años veremos como muchos gobiernos legislan de forma saludable, y penalizan ciertas prácticas empresariales. Conozco grandes empresas (+ de 500 empleados) en las cuales un 33% de su plantilla está medicada ¿hemos perdido el rumbo? ¿Cuál es la finalidad de una empresa?
¿Tu empresa es tóxica o saludable?
César Piqueras
Mi empresa que es Atento Teleservicios España, no es una empresa tóxica, es más que eso, creo que ya está tan contaminada que sus empleados estamos poco a poco quedandonos sin vida. Una empresa que sus trabajadores estan con paros y huelgas ( reivindicando unas condiciones dignas de trabajo, una buena formación para desempeñar tu trabajo y tiempo para poder realizarlo correctamente, etc…) gana el premio a
la mejor empresa y ambiente de trabajo. Cuando tiene un alto indice de
bajas por ansiedad.
Muy buenos consejos. Yo estaba en una empresa tóxica y mi salud se resentía mucho, como dice aquí, no solo era el estrés, el resto de mi cuerpo también fallaba. Ahora soy profesora de pilates e intento que mis alumnas más estresadas cambien también en lo posible sus hábitos…compartiré con ellas este post ya que lo encuentro de lo más interesante. Hace poco leí también unos consejillos para mantener la salud en una empresa que me parecieron muy útiles http://www.websa100.com/blog/2014/05/01/la-salud-de-mi-empresa/ lo dejo aquí por si a alguien le sirve de ayuda. Muchísimas gracias!! 🙂 un saludo!