Hablamos con Dan Tomasulo, experto psicólogo, primer graduado ejerciente como terapeuta especializado en psicodrama, autor de un gran número de publicaciones quien en esta entrevista nos ayuda a comprender cómo podemos afrontar nuestras adversidades, el papel de las emociones, y como valores como la bondad y la gratitud son decisivas en cada área de nuestras vidas.
Comunidad DEBO: Usted es el primer psicólogo graduado y terapeuta de psicodrama, ¿Cuál es el enfoque desde su punto de vista que debemos tener en cuenta ante una crisis como la actual?
Ahora es un momento en el que la esperanza cobra más importancia. Precisamente en estas circunstancias a todas las personas, da igual donde estén, nos han cambiado los planes. Todo lo que pensábamos que íbamos a hacer ha ido cambiando constantemente por la situación actual de la crisis sanitaria y esto es lo que nos ha dado la sensación de que no tenemos el control sobre las cosas.
En este sentido, una buena forma de afrontar todo esto es abordando el momento presente para así poder empezar a controlar lo que está pasando frente a nosotros, poco a poco. En mi libro aprender sobre la esperanza hablo precisamente de una esperanza “por disposición”. Lo más importante es tratar de estar en el lugar presente, en el momento, mientras lo estamos experimentando. Si somos capaces de extraer nuestra atención a la situación que estamos viviendo, esto nos va a dar pequeños alicientes para tratar de mentalizarnos, de poder mantener el control de las cosas, y a su vez todo aquello que vaya ocurriendo más adelante. Es lo mismo que cuando estamos cocinando. Cualquier comida es precisamente la explicación perfecta de este tipo de fenómeno, porque estamos trabajando poco a poco, y planeando pormenorizadamente cada detalle que se está realizando en todo este proceso. Primero estás partiendo zanahorias y estás pendiente de ello, pero sabes que luego viene lo siguiente, que igual puede ser encender el fuego para poder hacer una sopa. Y esta es precisamente la manera en que debemos actuar. Se le llama dar un acompañamiento transformacional y también un comportamiento coactivo. Ahora mismo no sabes cuándo vas a tener vacaciones. Es mejor trabajar directamente en estos “microestados”, para poder trabajar contigo mismo, sin adelantarte en el tiempo a un futuro más lejano.
Otra de las recomendaciones en esta crisis sanitaria es que todos nosotros “invirtamos” en las relaciones. A pesar de no poder abrazarnos y de no tener esa cercanía, es muy importante mantener las relaciones personales y estar conectado.
Si hacemos eso, estaremos avanzando en ese camino para conseguir esa esperanza. Cuando te fijas en la esperanza, puedes analizar el presente, el pasado y el futuro.
Cuando se habla de la “disposición”, de la presencia, del mindfulness, estamos hablando del ahora, así como del mañana, del futuro. Cuando hablamos de relaciones, precisamente estamos hablando tanto del pasado, de lo que hemos vivido con esas personas, y también de nuestro presente. Y también hacer constar por último que siempre tenemos que invertir es ser buenas personas con los demás y agradecidos con lo que tenemos.
La gratitud es recordar el pasado, dar gracias por las cosas que nos ocurrieron en el pasado. Sentirnos bien para poner en perspectiva, para poner en valor nuestro presente. En definitiva, recordar a todos que la bondad siempre está de moda.
Comunidad DEBO: La teoría de la esperanza va de la mano en la construcción de equipos, en los que residen el empowerment y la toma de decisiones. ¿Cómo empezar a movernos hacia el cultivo de la esperanza en pequeños equipos de trabajo?
El factor número uno en capital psicológico siempre es la esperanza. Cuando un equipo está trabajando existen diferentes tipos de capital: el capital financiero, el capital de habilidades que tienen cada uno de los profesionales y que todos ellos forman el conjunto de negocio en el que se está trabajando. Esto es una constante en cualquier equipo (educacional, deportivo). Hay capital en el que se trabaja que no es el principal. El capital psicológico atiende tanto a la aptitud, al capital individual como al del equipo, en el que estás trabajando en una empresa. Un equipo con capital psicológico tiene cuatro factores diferentes: esperanza, optimismo, resiliencia y confianza. La confianza en algunos casos en psicología positiva se le llama autoeficacia. Así es como tienes un sentido de empoderamiento. En todas estas cosas es en lo que hay que pensar cuando identificas a un buen profesional y a buen equipo. Si pudiera ser un acrónimo sería HERO. H sería esperanza E autoeficacia, R resiliencia y O optimismo. Sabemos el capital psicológico, porque cuando a uno la vida le hace ir para atrás, por algún tipo de problema que tiene es cuando realmente es capaz de regresar con la resiliencia a ese capital psicológico.
La resiliencia es algo clave. Cuando tienes un problema, no solo eres capaz de regresar sino que en ocasiones incluso lo haces con más fuerza. También el optimismo es muy necesario, ya que te permite no sólo estar aquí sino ver el futuro, ver un horizonte, un más allá. La autoeficacia o autoconfianza te permite creer en ti y en tu equipo y saber que lo que estás haciendo sea una realidad. No obstante, la esperanza es la más importante de todas ellas. En estudios de análisis psicológicos dicen que las personas que tienen mucha más esperanza son capaces de visualizar lo que quieren hacer, y que esto puede hacerse realidad, porque no ven obstáculos, ven retos. No ven bloqueos en el camino, ven posibilidades. Si se va a contratar a una persona en el equipo, yo aconsejaría que contrataran a personas que tengan mucha esperanza.
Hay una diferencia cuando se habla de equipos pequeños. Existe un fenómeno muy importante que se llama “resonancia de positividad”. Si estamos en un equipo pequeño y uno hace algo bueno por otra persona, los demás aprecian esa bondad y se ven con posibilidades de también poder hacerlo y eso es una “resonancia de positividad”. Habrá una espiral de bondad, un comportamiento que puede ser expandido. Si es un equipo grande, por ejemplo de cien personas es más complicado. En el caso anterior, unas cuantas personas de esas cien verán esa actitud, pero no se expandirá. Cuando se trabaja con grupos grandes o entidades educativas, lo que se debe hacer es impulsar programas para hacer patente esa bondad, crear programas para celebrar y hacer más visible esa bondad.
Otra cosa que yo hago cuando estoy trabajando con las organizaciones es tratar de crear un ambiente de “pronoia”. Todos conocemos la palabra paranoia, pero pronoia es justamente lo contrario. Es la sospecha que tienes detrás de la mente de que las personas están diciendo cosas buenas de ti.
Comunidad DEBO: ¿Es Posible Aplicar Los “Métodos De Acción” Que Escribiste En Tu Libro Para Terapia De Grupo A Los Equipos En El Lugar De Trabajo? ¿Es Posible Mejorar La Formación Y El Rendimiento Del Equipo Aplicando Estas Técnicas?
Efectivamente, pueden ser aplicados esos métodos, pero depende mucho de los grupos y de donde se encuentra el negocio en el que estás trabajando. Muchos equipos trabajan muy bien y lo que hay que hacer precisamente es aumentar ese rendimiento. Otros han estado trabajando de una manera y deben cambiar su forma. Y otros no trabajan nada bien y deben aprender a mejorar, cambiar su metodología.
Lo primero que debes tener en cuenta cuando trabajas con un equipo es que no debes tener un “molde” que sirva para todos. Antes debes saber dónde está el equipo y cuáles son realmente sus necesidades. Cuando te encuentras en una situación de desconocimiento del equipo se debe empezar desde el principio, de lo más básico, de lo que puedas encontrar. Si el equipo trabaja bien empezarás con pequeños cambios. Pero si trabaja peor, debes ir poco a poco introduciéndote en el proceso.
Todo mi trabajo y mi investigación gira en torno al agradecimiento, el principio de la gratitud para poder asesorar respecto a su estado actual. Porque si vas a cometer un error, no hay mejor lado que el de estar en el del exceso de la gratitud. El principio básico es mejorar la comunicación desde la gratitud y la bondad. Ese factor será decisivo para avanzar. Hay diferentes técnicas para el aprendizaje de esa gratitud. Ésta es el fruto más accesible en el árbol de la psicología positiva, es aquello que está a mayor alcance, más accesible, y que siempre está ahí. Es por tanto un buen inicio. La bondad es algo que tienes que buscar, y no hay nada malo en querer buscar más bondad.
Comunidad DEBO: Cuando se habla de psicología positiva, muchas de las prácticas son cuestionadas o invalidadas por ciertos individuos al aplicarlas en algunas compañías ¿Cómo podemos abordar estas negativas y dar un aliciente a quienes dudan de estas actividades?
Siempre que trabajas en grupo tienes que entender que siempre habrá personas que estarán fuera de una mentalidad positiva. En este caso, nunca se debe trabajar directamente con ellas porque entran en conflicto contigo. Se debe encontrar un apoyo. Por ejemplo, en el caso de una compañía de 50 personas, yo diría vamos a comenzar tratando con mucha más bondad y con más gratitud. Esas personas que entran en conflicto serán precisamente las que digan para qué vamos a ir en esa línea y se preguntarán que si se va a trabajar por ahí es que existe verdaderamente un problema. En ese caso, se debe tomar en cuenta su posicionamiento y agradecer que sean honestos con lo que quieren. Hay que agradecer la valentía de decir algo así en público.
Luego les diría al grupo si hay alguna persona presente que también ha tenido esa duda y si ya tiene una respuesta. Si existen personas que entran en conflicto hay un polo opuesto y precisamente esa persona está dispuesta y en medio de ese grupo. Si contesto a la persona en conflicto estaré en una confrontación, pero sin embargo si esta persona en conflicto cambia de parecer tendré un aliado. Cuando invitas a las personas a realizar alguna transformación, normalmente esas personas ya son muy persuasivas. La persona que se ofreció a responder a la pregunta no sólo se implica sino que participa y contagia a otras personas. En ese momento soy un facilitador, no un maestro. Cuando esta persona está en medio y antes estaba en animadversión, ahora habla y se convierte en una persona “bilingüe”, tanto habla en negativo como en positivo. Por tanto, pueden ponerse en el lugar de otras personas. Esa persona puede decir que lo de antes no funcionó, pero que ahora puede cambiar y tener un cambio de perspectiva, y en ese momento en lugar de preocuparse por su futuro empieza a pensar en su presente, en velar por el buen ambiente de todos. Tal vez no funcione, pero es importante intentarlo, porque todos necesitamos sentirnos bien con nosotros mismos. También es conveniente dar participación a personas que han tenido esa transformación. No debemos tratar de “ganar” a la persona en conflicto sino que esta no se “gane” al resto del grupo. Las personas que ya han tenido resiliencia deben participar y hablar con el resto para de esta forma crear un ambiente de mimetismo en el grupo.
Comunidad DEBO: Dentro de su idea de positivity, trabaja el concepto de resiliencia y, de ser así, como la entiende y cómo la trabaja con las personas. ¿Qué factores cree que son críticos para su desarrollo?
Lo que voy a responder puede que no sea comúnmente aceptable. Hay muchos investigadores en resiliencia y cada uno lo aborda y lo analiza de una manera diferente.
Yo tengo una forma muy particular de verla. Realmente la he vivido y precisamente sé de lo que hablo. Voy a compartirlo, pero no es como digo la más habitual. La primera la podemos explicar a modo de historia. Una persona te da una cuchara llena de sal y tienes una taza con poca agua. Si echas la sal sientes todo el sabor. Cuando algo te ataca como una cucharada de sal, primero hay que cambiar el contenedor con el que estás trabajando. No quieres trabajar con algo así, quieres poner la sal en un “lago”. De tal manera no están cambiando la cantidad de sal sino la forma de recibirlo y de aguantarlo. Hay que abordar el problema desde una perspectiva en la que menos nos afecte. No podemos cambiar las cosas que nos pasan, pero sí la forma en la que las recibimos. La segunda cosa es detectar qué cosas funcionan bien en tu vida y poner el foco en el agradecimiento. Cuando te pasa algo malo es como si estuvieras tomando una taza muy pequeña. Cuando te pasa esto malo y empiezas a sopesar todas esas cosas buenas que tienes es como si esa cucharada de sal no estuviera en la taza sino en un lago. De esta manera, se crea un cambio de perspectiva que te invita a tener mayor proyección en la resolución del problema. Muchas personas tienen otra manera de ver las cosas, pero para mí y para quienes han experimentado con ello y están a mi alrededor esto funciona.
Yo trabajo con imágenes mentales, porque resultan muy efectivas. También digo que nuestras emociones negativas son como piedrecitas, y que las positivas son como plumas. Muchas personas entonces me dicen que esa comparativa no es justa, pero entonces yo les contesto que lo que deben analizar es tener el mayor número de plumas.
Comunidad DEBO: Usted se considera un “amateur-Crastinator”, ¿ya ha encontrado la cantidad perfecta de tiempo para retrasar una tarea?. Si es así, ¿qué consejos nos puede dar para mejorar nuestra creatividad?
El mejor espacio en el que se puede estar en la vida es aquel que nos permita espontaneidad. No tienes que estar pensando en más allá de lo que estás haciendo, tienes que estar en el momento, en crear ese entorno que te permitirá llegar a esa creatividad, concentrándote en el presente.
Comunidad DEBO: Dentro del libro de Duckworth – Grit- Pasión , Perseverancia y Determinación, menciona que una de las cualidades para desarrollar un carácter positivo es la Esperanza, menciona que nuestro esfuerzo es clave para tener un mejor futuro, así como tomar decisión de desarrollar un actitud optimista para encontrar una enseñanza de calidad. ¿Qué papel tiene el lenguaje para reflejar una mentalidad abierta para crear una armonía/congruencia entre nuestros actos y nuestras palabras’?
Trabajo mucho con esta área y debo decir que el lenguaje es importante a la hora de reflejar una mentalidad abierta, creando así esa armonía entre lo que hacemos y lo que decimos.
Comunidad DEBO: ¿Qué aspectos o competencias de la psicología positiva cree que deberían estar más presentes en la educación actual?
Lo primero de todo son las fortalezas de carácter. Estas tienen más capacidades predictivas que cualquier otra cosa. Aquel niño que va a tener éxito es aquel que ha aprendido a utilizar sus fortalezas de carácter. Los niños con proyección son aquellos que son sensibles a utilizarlos de la manera más correcta. Son como las cuerdas de un violín. Si las apretamos demasiado no resultan afinadas, y si no las usamos tampoco nos funcionarán correctamente. Entonces, lo primero que debemos hacer es detectar las fortalezas de los niños y luego enseñarles a cómo utilizarlas.
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