Seguimos con nuestro especial sobre teletrabajo con esta cuarta entrega. Puedes leer aquí el post anterior: Regular la desconexión digital en un mundo interconectado

Últimamente ha emergido el concepto del empleo nómada, es decir trabajar desde cualquier sitio teniendo la tecnología a tu alcance. En rhsaludable hemos preguntado  a varias expertas si el futuro laboral nos emplaza a esta figura.

Así Mercedes Ventura, profesora de la Universidad Jaime I (UJI) de Castellón señala rotundamente que “sí dado que el avance tecnológico hace posible que podamos trabajar desde cualquier lugar. En este sentido señala que “esta entrevista la he podido realizar sin tener que acudir a ninguna oficina desde casa. La tecnología es maravillosa, renovar o morir.  De ahí, la necesidad de adaptarse a los nuevos tiempos y el teletrabajo ha demostrado ser muy beneficioso para las empresas  en cuanto a la reducción de costes fijos, pudiéndose ahorrar dinero en alquileres, ahorro energético y en trasporte, entre otras”.

Por su parte, Raquel Poquet, Profesora Máster PRL y SIG de la Universidad de La Rioja afirma que “España era hasta antes de la pandemia de COVID-19 un Estado donde prevalecía claramente el trabajo presencial. A raíz de la pandemia es cuando se produce un aumento del teletrabajo –forzado- como medida que han tomado muchas empresas para evitar acudir a ERTES y seguir con su productividad. No obstante, el teletrabajo no era desconocido para España. De hecho, en la reforma de 2012 ya se introdujo una regulación jurídica sobre el mismo –más o menos completa- en el artículo 13 del Estatuto de los Trabajadores.

“El interrogante que surge ahora es si, cuando se llegue a la “nueva normalidad” se volverá a la prestación de servicios tradicional –presencial-, o bien se continuará con el teletrabajo. No cabe duda que aún no estamos preparados para cambiar radicalmente a la modalidad de teletrabajo, pero considero que con el tiempo, y ante los parámetros que se ven en el futuro, muchas empresas ya están preparando el terreno para pasar al teletrabajo. Eso sí, no todas las empresas tendrán la misma facilidad, ni todas podrán aplicar el 100% de teletrabajo”, destaca esta experta.

Por su parte, Mar Sabadell de la Universidad Oberta de Cataluña (UOC) señala que “la digitalización y la globalización favorecen que una parte del trabajo sea teletrabajable. Cuando la prestación se basa en el manejo de información, y ésta puede estar disponible digitalmente, la presencia en un lugar concreto es prescindible. Vamos hacia un empleo donde el trabajo no vendrá definido por el “lugar” de trabajo, sino por el contenido de la actividad a desarrollar, y  de esto dependerá en qué lugar se ha de realizar”.